«Como comunidad universitaria debemos dar el ejemplo»


«Como comunidad universitaria debemos dar el ejemplo»

Ayer la Universidad Nacional de San Luis (UNSL) lanzó una nueva campaña de concientización y prevención contra el coronavirus. En este marco, el Dr. Marcelo Riera, responsable Covid-19 de la UNSL y el Dr. César Almeida, presidente de la Dirección de Obra Social para el Personal Universitario (DOSPU), comparten sus recomendaciones a la comunidad universitaria para no bajar la guardia y ayudar a evitar la propagación del virus.

Ambos especialistas coincidieron en señalar que dar el ejemplo con una buena práctica de cuidado es la mejor manera de fomentar la conciencia individual y grupal. En este sentido, el Dr. Riera advirtió: «hay que presentar el escenario sanitario distinto al del año pasado, ya que no es distinto el virus, sino sus cepas, son distintos los grupos afectados, la curva de crecimiento, eso cambia el escenario actual».

Por su parte y frente a este nuevo panorama, el Dr. Almeida apeló a la responsabilidad de todo el personal universitario y la necesidad de tomar conciencia: «en esta nueva oportunidad pretendemos que la comunidad universitaria además de difundir, pueda pregonar con el ejemplo las diferentes formas de cuidarnos frente al Covid-19».

Consultado sobre la situación actual de Covid-19 en el país, el Dr. Riera sostiene que este año se espera que existan más casos de los que hubo en la primera curva y que los mismos puedan revestir mayor gravedad. Además, que a pesar de la gravedad exista un corrimiento de los grupos etarios, es decir, una afectación a personas más jóvenes de lo que se observaba.

Asimismo, el especialista sostiene que se observa a través de los reportes de las unidades de terapias intensivas que la enfermedad acelera el proceso de neumonía, que antes aparecía entre el décimo o doceavo día, y ahora entre el sexto o séptimo día. «Tenemos un escenario más agresivo en torno al comportamiento, con mayor carga de enfermedad, es decir mayor contagiosidad y un corrimiento de los grupos etarios afectados», afirmó.

Estos cambios en parte se deben a que el comportamiento de la enfermedad tiene mucho que ver con las nuevas variantes que están circulando, que tienen mayor contagiosidad. Por otro lado, porque en el grupo etario en el que está circulando el virus (12-50 años) es donde se vislumbra que hay un mayor relajamiento. Esta situación es diferente a la del año pasado, donde la enfermedad estaba concentrada en los grupos mayores a 50/60 años.

¿Qué podemos hacer para prevenir el Covid-19?

Hoy en día, el eje debe estar centrado en la reducción de casos, tomando todas las medidas necesarias. Es por este escenario actual que el Dr. Riera sostiene que es necesario tener en cuenta cinco (5) medidas esenciales:

  • En primer lugar, reducir la circulación. Esto no quiere decir no circular, sino que implica reducir al mínimo e indispensable los movimientos a realizar y priorizar la realización de trámites online.
  • El segundo aspecto es reducir los números de contactos con los que nos frecuentamos.
  • El tercero es usar SIEMPRE el barbijo, al salir a la calle, en la oficina, al salir del trabajo, en el supermercado, cubriendo nariz, boca y mentón.
  • En cuarto lugar: mantener la distancia. Está demostrado que la distancia (recomendablemente de dos (2) metros) es muy importante por cómo se vehiculizan las partículas del virus.
  • El último punto esencial es la ventilación en corriente, abriendo una puerta y una ventana de manera simultánea.

Más recomendaciones para cuidarnos en la UNSL

El Covid-19 es un virus respiratorio, por ello la transmisión de persona a persona es fácil. Está en las gotas de flügge que emitimos cuando hablamos, tosemos, estornudamos, cantamos o gritamos. Está demostrado que esos aerosoles penden en la superficie por determinado tiempo.

«En ese contexto, la ventilación es la que ha venido a dar un salto de eficacia en torno a la reducción de la transmisión», agregó Riera, explicando además que el barbijo tiene una gran implicancia como medida de protección, y si uno habla poco y está poco tiempo en un espacio compartido, el tiempo de contagio baja drásticamente.

Junto a estas recomendaciones, el experto sostiene que es necesario dejar atrás la idea de usar tapabocas, ya que la medida de protección adecuada son los barbijos tricapa (como los quirúrgicos) o aquellos que poseen filtros, como los que realiza el CONICET. Sobre esto afirmó: «El tapabocas debería desterrarse, porque incluso hasta el nombre está mal colocado, ya que necesitamos que se cubra bien la nariz, boca y mentón, cosa que el barbijo sí cubre».

Sumadas a las medidas previas de cuidado, un buen lavado de manos y el uso sistemático de alcohol en gel, reducen el riesgo de compartir elementos de trabajo (computadoras, escritorios).

Con respecto al accionar en la Universidad, el Presidente de la DOSPU sostiene además que es necesario que todas/os tomemos conciencia de que somos nosotros/as mismos/as los/as que contagiamos a nuestros pares y seres queridos. Sobre esto el Dr. Almeida afirma: «La comunidad universitaria es clave en la campaña de concientización, somos nosotros/as mismos los/as que debemos llevar el ejemplo a nuestras casas, lugares de trabajo y compartir las enseñanzas con las personas que nos rodean y forman parte de nuestra vida».

Variantes de interés epidemiológico del SARS-COV2

Hasta ahora no se ha encontrado ningún medicamento que sea resistente al virus. Es al día de hoy que no existe un tratamiento específico probado, si bien hay miles de moléculas que se están probando, con menor o mayor efectividad, no hay un único medicamento para su tratamiento.

«El Covid-19 es un virus al que hay que tenerle respeto y no miedo (…) es un virus que se ha adapatado muy bien, que ha generado todas las variantes necesarias porque ha ido variando y generando cepas nuevas, de las cuales cuatro (4) de ellas circulan en el país», explicó Riera.

Las variantes y mutaciones virales forman parte de un contexto en la adaptación de cualquier microorganismo, en este caso, un virus. Al mutar, buscan un proceso de adaptación. La importancia que tiene desde lo sanitario determinar las variantes está dada por cuatro (4) aspectos: conocer la transmisibilidad y la capacidad de infección que tienen, saber la gravedad y virulencia del comportamiento y determinar la respuesta a las terapéuticas en estudio y validadas y finalmente, conocer el alcance de las vacunas frente a ellas.

Las variantes se dividen en grupos: de interés, de preocupación y de gran consecuencia. Dentro de las primeras se encuentran las cepas de Nueva York y la Brasilera de Río de Janeiro. Dentro de las del segundo grupo se encuentran las cepas del Reino Unido, la Cepa Manaos, la de California y Sudáfrica. Sobre estas últimas Riera afirmó que existe una evidencia demostrada de mayor transmisión y casos más graves, que generan mayor preocupación por la hospitalización y falta de respuesta terapéutica.

Con respecto a las cepas de gran consecuencia, no hay evidencias de variantes existentes, sin embargo se genera esta clasificación ya que es probable en el marco de la Pandemia que pueda llegar a resurgir una variante a propósito de las anteriores. En ello radica la importancia de la vigilancia epidemiológica y virológica de los sistemas de salud del mundo entero.

Síntomas de Covid, contactos estrechos y tiempos correctos para hisoparse

Todo paciente que tenga sintomatología compatible con la enfermedad debe hisoparse, no debe tratar de interpretar diagnósticos que estén vinculados a otras causas. Por eso es tan importante la evaluación ante la aparición de síntomas con un profesional médico que defina puntualmente y aclare si hay otras causas y si el paciente debe hisoparse.

Cuando una persona contrae el virus, la condición previa marca el agravante o no de la enfermedad. Está visto que en pacientes previamente sanos la evolución es mucho más leve y sin complicaciones que los previamente enfermos.

La sintomatología se comparte con otras enfermedades, por eso puede confundirse la enfermedad por Covid con una gripe. Con respecto a esto, Riera explica que la febrícula, tos, dolor de garganta, dificultad para respirar, dolor de cabeza, mialgia o la presencia de vómitos y diarrea son síntomas compatibles con la enfermedad. «En este contexto uno tiene que tener en cuenta que necesita transitar dos (2) de estos síntomas para ser considerado sospechoso. La pérdida del gusto y del olfato repentina, sin otra causa que lo justifique, es señal de Covid», agregó.

Ante la confirmación de un caso positivo, es necesario diferenciar los contactos estrechos de esa persona, ya que no es lo mismo convivir con un positivo, que haber visto a una persona con Covid-19 en una reunión.

Según datos del Ministerio de Salud de la Nación, se constituye como contacto estrecho toda aquella persona que:

  • Haya permanecido (durante al menos 15 minutos o más) a una distancia menor a dos (2) metros, con ventilación inadecuada y medidas de protección inadecuadas con un caso confirmado, mientras el caso presentaba síntomas, o durante las 48 horas previas al inicio de síntomas. (Por ejemplo: convivientes, visitas, compañeros/as de trabajo).
  • Haya proporcionado cuidados a un caso confirmado mientras el caso presentaba síntomas o durante las 48 horas previas al inicio de síntomas y que no hayan utilizado las medidas de protección personal adecuadas.
  • Para todos los casos, el periodo de contacto se considerará desde las 48 horas previas al inicio de síntomas del caso de Covid-19.

Hoy todo contacto estrecho se debe aislar por el mismo período de tiempo que se aísla el caso positivo (diez (10) días) y solo hisopar a aquel que está desarrollando síntomas. El asintomático, estando aislado no sería transmisor de la enfermedad.

Cuando uno se hisopa habiendo sido estrecho, antes del quinto o sexto día del contacto se puede tener una PCR negativa, pero no quiere decir que no se tenga el virus. El período de incubación promedio de la enfermedad está entre el quinto y sexto día, por ello, uno debería esperar hasta el séptimo u octavo día para realizarse el hisopado.

Dato

Las personas que cursan la enfermedad de Covid-19 pueden ser monitoreadas por el Observatorio creado para este fin en la DOSPU. Si el/la paciente lo desea, las doctoras les realizarán un monitoreo e indicarán los pasos a seguir, de acuerdo con la evolución de la enfermedad.

Quienes estén afiliados y deseen este servicio, deberán comunicarse mediante vía WhatsApp al 2664647333 o al correo electrónico: mesadeentradadospu@gmail.com.

Fuente
Dr. Marcelo Riera, responsable Covid-19 Universidad Nacional de San Luis.

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