Con un martes cargado de actividades se realizó la presentación de la Maestría en Derechos Humanos y Ciudadanía. Se trata de un nuevo posgrado impulsado por la Universidad Nacional de San Luis y la Universidad Nacional de La Plata.
La Jornada comenzó con la inauguración de la muestra fotográfica “Miradas en rebeldía” de La Bulla Comunicación Alternativa, continuó con la realización del panel «DDHH en la historia argentina reciente: experiencias de lucha locales desde la voz y el cuerpo de los protagonistas» y con la entrega del Doctorado Honoris Causa a Nora Morales de Cortiñas.
Por la tarde se expuso el panel «DDHH en la coyuntura regional y local: vulneraciones y resistencias en torno al género, medioambiente, infancias/juventudes y trabajo». Posteriormente, se realizó la presentación de la “Maestría en Derechos Humanos y Ciudadanía” a cargo de Patricia Flier, Directora de la Maestría (UNLP) y el vice Director Gabriel Rosales (UNSL). Como cierre del evento, se desarrolló una entrevista pública con Cortiñas.
Respecto a la realización de la Maestría, Flier remarcó el esfuerzo previo que conllevó la conformación del posgrado, agradeciendo a distintos profesionales de la Universidad Nacional de San Luis, «somos un equipo interdisciplinario que concebimos el trabajo como una tarea colectiva y que destacamos el compromiso social de la universidad, asumiendo con sensibilidad y con espíritu crítico nuestro rol de docentes e investigadores», afirmó.
En cuanto a los objetivos del posgrado, Gabriel Rosales habló sobre los propósitos que se persiguen: «queremos construir no sólo un espacio académico, sino un espacio de intervención política y pedagógico en la realidad regional, que tenga un impacto en la comunidad», dijo. Al mismo tiempo, habló del desafío de lograr el acceso de este espacio de formación para distintos profesionales, generando un espacio autosustentable pero accesible al resto.
Como cierre de la Jornada, la cofundadora de la organización Madres de Plaza de Mayo respondió las preguntas de los presentes, con mensajes y anécdotas cargadas de emoción. Cortiñas, dedicó su distinción a los 30.00 desaparecidos, a los luchadores de ayer y de siempre. Al mismo tiempo, remarcó la importancia de salir a la calle, de no bajar los brazos y de renovar las esperanzas con el cariño y la fuerza que transmite la gente comprometida con la causa. «No queremos venganza, queremos justicia y eso es por lo que tenemos que seguir luchando. Las Madres no somos heroínas, somos madres como ustedes, así que a todos los presenten: luchen, luchen, luchen», concluyó.
